Pocas películas pueden presumir de haber cambiado para siempre la forma en la que nos vestimos para ir al colegio o a una cita. Clueless, estrenada hace tres décadas, no solo conquistó al público con su humor ingenioso, sino que se convirtió en un referente definitivo de estilismo icónico.

Hoy, su impacto sigue vigente: diseñadores la citan, celebridades la reinterpretan y redes sociales enteras rinden homenaje a los looks escolares de Cher Horowitz, Dionne y compañía.

El conjunto a cuadros amarillos de Cher Horowitz es, sin duda, el uniforme no oficial de los 90. La blazer con falda plisada, las medias altas y la mochila mini marcaron un antes y un después.

Y aunque el look ha sido reinterpretado desde Penélope Disick hasta Harry Styles, la versión original sigue siendo insuperable. Fue más que un outfit: fue una declaración de moda noventera que supo mezclar lo preppy con lo provocador.

Pero no todo fue tartán. La película nos regaló una masterclass en moda versátil: desde el vestido lencero de Calvin Klein minimalista, sensual y pionero del “naked dress” hasta el inolvidable mini rojo de Alaïa, que incluso bajo una amenaza se defendía con elegancia. ¿Quién más podría decir “no me puedo tirar al suelo, ¡esto es un Alaïa!” y convertirlo en historia del cine?

Y sí, hablamos de looks escolares, pero con una sofisticación que roza lo couture. Blusas románticas, chalecos estructurados, diademas, y faldas con botones demuestran que en Clueless, la ropa de preparatoria podía ser tan chic como una editorial en París.

Las clases de gimnasia tampoco escaparon al estilismo icónico: Dionne y Cher popularizaron el athleisure mucho antes de que fuera tendencia global, con coordinados monocromáticos y capas que aún hoy se ven frescos.

Clueless: Moda Que Sigue Reinando
Clueless: Moda Que Sigue Reinando

El fenómeno va más allá de la nostalgia. En un mundo donde la moda es cada vez más consciente del archivo y la pop culture, Clueless se mantiene como referencia viva. El revival de los 90 no estaría completo sin sus icónicos estilismos. Y la prueba está en las pasarelas recientes: boinas, minivestidos coquetos y siluetas preppy han reaparecido en colecciones de casas como Miu Miu y Sandy Liang.

¿La razón? Porque Clueless no solo dictó tendencias; las convirtió en inspiración fashion. En cada escena, hay una lección de estilo, un guiño a la autoexpresión y una defensa absoluta del estilo personal. Treinta años después, Cher Horowitz sigue teniendo razón: “¿No es el vestido lo que hace todo el look?”

*IMAGEN: Google Images