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El rugido de los motores no fue lo único emocionante del Grand Prix de Fórmula 1 este año. La casa suiza de relojería de lujo, TAG Heuer, celebró su regreso como Cronometrador Oficial de la F1 y se convirtió en el primer socio titular del Gran Premio de Mónaco. Para celebrar, la marca organizó una fiesta con dos invitados de lujo que se robaron todas las miradas: Naomi Campbell y Patrick Dempsey.
La cita fue a bordo del yate Le Bougainville, anclado en el glamuroso puerto, donde se reunieron diversas celebridades y socios de la marca, en un ambiente totalmente deportivo.
Entre los presentes estuvieron Lee Jung-Jae, Christian Horner, Naomi Schiff, los pilotos de Oracle Red Bull Racing Max Verstappen y Yuki Tsunoda, y obviamente Naomi y Patrick, embajadores de la marca.
En un momento, la modelo británica tomó el control de las tornamesas para regalar un DJ set inolvidable, que fue el broche de oro de la velada, junto al músico francés Kavinsky y una presentación en vivo de Lola Young.
“Este momento es un reflejo de todo lo que representa TAG Heuer”, declaró Antoine Pin, CEO de la marca. “Carreras, creatividad, precisión y las personas que nos inspiran a avanzar. Estamos de regreso este año, y orgullosos de compartir esta energía con el Principado, nuestros socios y toda la familia TAG Heuer”.
Fue una noche inolvidable en la que la relojería de lujo se fusionó con la velocidad, complaciendo a los invitados con todo el estilo.