Moda
La colección Issey Miyake Fall 2025 es un ejercicio de experimentación textil y conceptual que desafía las normas de la sastrería tradicional. Con una combinación de formas escultóricas, tejidos innovadores y una ejecución performática, el director creativo Satoshi Kondo explora la intersección entre la moda, el arte y la funcionalidad.
Inspirado en la dualidad entre lo abstracto y lo concreto, el desfile se convierte en un diálogo visual que juega con la percepción y la identidad del vestir.
La sastrería reimaginada: entre lo estructural y lo fluido
La colección presenta una reinterpretación del tailoring deconstruido, con chaquetas masculinas usadas al revés y materiales con acabado similar al alabastro que drapean en curvas impredecibles.
Kondo manipula la estructura con una precisión quirúrgica, logrando que cada prenda parezca esculpida más que confeccionada. La sastrería aquí no es rígida, sino adaptable y en constante transformación.
Volúmenes acolchonados y el eco del pasado
Una serie de piezas acolchadas—vestidos rectos, camisetas y shorts—se introducen en capas transparentes que crean la ilusión de cojines sobrecargados, un guiño directo a los icónicos abrigos y vestidos futón de Miyake.
Esta exploración del volumen y la textura refuerza la dualidad entre lo estructurado y lo etéreo, elementos recurrentes en la casa japonesa.
Moda como metadiscurso: prendas que desafían la función
Los looks que transforman bolsas y totes en prendas de vestir funcionan como una reflexión irónica sobre el consumo y la moda como arte utilitario.
En un ejercicio de auto-referencia, la colección propone piezas que podrían ser parte de una exposición imaginaria titulada Abstract, Concrete and In-Between, difuminando los límites entre moda, arte conceptual y marketing.
*IMAGEN: Google Images
