GINO SARFATTI, UNO DE LOS DISEÑADORES DE ILUMINACIÓN más famosos de Italia, nació en Venecia en 1912 y revolucionó el enfoque de lo que significaría iluminar a través de 600 diferentes modelos o un poco más, que incluían materiales poco convencionales, diseños inusuales y nuevas tecnologías. Con el tiempo todo este concepto se convirtió en una exitosa empresa llamada Arteluce, que en su momento no solo daba el servicio de diseño de iluminación a medida, sino también a gran escala con proyectos como el Teatro Regio de Turín y el Palazzo Bianco
de Génova. En 1973 fue comprada por Flos, un fabricante líder a nivel internacional de lámparas de diseño de alta gama y sistemas de iluminación avanzado con sede en Milán.

Dentro de sus grandes creaciones, Sarfatti diseñó una pieza de iluminación que se conviritó en
su modelo icónico: la lámpara de mesa modelo 600. Esta salió a la venta en 1966, mismo año de la fundación de Bottega Veneta que abrió sus puertas en la ciudad de Vicenza, creando sus primeros bolsos los cuales se distinguían por sus formas flexibles realizadas por sus artesanos y la extraordinaria calidad de su suave cuero. Precisamente esta coincidencia es parte también de la inspiración para crear esta memorable colaboración en donde ambas casas proponen, desde su conocimiento y perspectiva, la creación de una pieza flexible y fuera de lo convencional, que sin duda se convierte en un objeto de deseo que querrás tener como parte de la decoración de tu hogar.

La reinterpretación del modelo 600 de Flos y Bottega Veneta tiene una base de cuero desarrollada con las exclusivas ediciones Intrecciato e Intreccio Foulard creadas por Bottega Veneta en combinación con la última tecnología LED que conserva la forma de la bombilla original del modelo de Sarfatti proporcionada por Flos. Esta lámpara se puede colocar en cualquier superficie ya que brinda una iluminación suave y relajante, pero sobre todo precisa dependiendo el ángulo

en el que muevas el reflector. Está disponible en dos tamaños pequeño y grande, y en una colorida variedad que va desde negro, rojo, gris y verde esmeralda hasta, por supuesto, el emblemático tono verde de Bottega Veneta.