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Tom Hanks, a sus 68 años, ha reflexionado sobre el proceso de envejecimiento y ha llegado a una conclusión sorprendente: la etapa más difícil de la vida no son los 50 o 60, sino los 35.
En una reciente entrevista, el icónico actor compartió que, aunque muchos anhelan volver a ser jóvenes, él no desearía regresar a esa edad ni siquiera si pudiera.
Para Hanks, los 35 años representan un momento crítico donde se enfrentan numerosos desafíos físicos y emocionales que pueden ser abrumadores.

En esta fase de la vida, el metabolismo comienza a decaer y los efectos del envejecimiento comienzan a manifestarse. Hanks explicó que es un periodo en el que las responsabilidades laborales y familiares se multiplican, lo que puede hacer que la vida se sienta como una carga.
En contraste, ahora disfruta de una mayor libertad, ya que sus hijos han crecido y puede dedicar tiempo a cuidar su salud. Esta capacidad para enfocarse en el bienestar personal es, según él, uno de los principales beneficios de la madurez.
El actor también ha expresado su satisfacción al interpretar diversas edades en su nueva película Here, donde se utiliza tecnología de rejuvenecimiento.

Esta experiencia le ha permitido explorar cómo el tiempo impacta a las personas de maneras distintas. Sin embargo, a pesar de poder verse más joven en la pantalla, Hanks enfatiza que no se siente atraído por la idea de regresar a su juventud. Para él, los 35 años son complicados porque se debe aprender a lidiar con el desgaste físico y emocional, mientras se carga con las expectativas de la vida adulta.
La película, dirigida por Robert Zemeckis, aborda la historia de varias generaciones que habitan la misma casa a lo largo de un siglo, lo que resalta cómo el paso del tiempo afecta a cada individuo.
Hanks, al reflexionar sobre su propia trayectoria, concluye que ha llegado a un punto en su vida en el que se siente más equilibrado y en paz.
En definitiva, la perspectiva de Hanks nos invita a reconsiderar cómo valoramos las distintas etapas de la vida. En lugar de añorar la juventud, podría ser más enriquecedor abrazar la madurez y los aprendizajes que vienen con cada año vivido.
La verdadera plenitud, según el actor, se encuentra en aceptar la edad que uno tiene y disfrutar de las experiencias que trae consigo.
*IMAGEN: Google Images