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Tras ganar el León de Oro en el Festival de Cine de Venecia por su debut en inglés, “La habitación de al lado”, el autor español Pedro Almodóvar se acercó a su casa, al Festival de Cine de San Sebastián, para celebrar tanto la película como su nuevo reconocimiento, el Premio Donostia a la trayectoria profesional.
En la conferencia de prensa, Almodóvar dijo que su primer largometraje, “Pepi, Luci, Bon”, se estrenó por primera vez en San Sebastián en 1980 y que desde que llegó al festival el miércoles, que también era su cumpleaños, 74 se había sentido abrumado por una “enorme cantidad de emoción” al reflexionar sobre los 44 años de cine desde entonces y el impacto que el festival había tenido en su carrera.
“No podía parar de llorar y las lágrimas corrían por mis mejillas”, dijo. “Ha sido mucho más emotiva de lo que esperaba, casi excesivamente emotiva”.
Almodóvar señaló que “Pepi, Luci, Bon” —que atrajo la atención por su mezcla de melodrama, modernidad de la Movida y una escena de lluvia dorada más un anuncio de perfumes tirados por pedos creado por su protagonista, que trabaja en una agencia de publicidad— era una “película muy defectuosa”. Pero dijo que también era “el comienzo” para él y una carrera que abarcaría unas 23 películas.
“Así que cuando llegué ayer al hotel, me di cuenta de que en estos 44 años desde entonces, las cosas habían cambiado enormemente, en general en el mundo pero también en mi vida. Pero esta ciudad sigue provocándome emociones muy profundas 44 años después”.
A lo largo de su trayectoria, Pedro Almodóvar dijo que “algunos fueron mejores que otros, pero todos son míos, todos me pertenecen y creo que este es un privilegio que, lamentablemente, no todos los directores pueden decir”.
Agregó que, junto con su hermano productor Agustín Almodóvar, con quien fundó la productora El Deseo, los dos siempre habían tenido el “deseo de ser autónomos e independientes y ser dueños de lo que hacíamos”.
