Moda

Lo que vemos a veces no es lo que parece, pues muchas veces hemos sido víctimas de perfiles de socialité, vidas perfectas, viajes, cenas románticas, looks de grandes marcas, glamour y diamantes que dan la pinta a través de fotografías en redes sociales.
Esta es la verdadera historia de Anna Delvey, una heredera millonaria que enamoró a la socialité de Nueva York y que vivía de lujos como cenas en restaurantes caros, hoteles de lujo, jets privados y un armario lleno de los mejores diseñadores del mundo, todo esto era verdad hasta que se descubrió la mentira que escondía detrás de esas gafas Chanel.
La nueva serie de Netflix True Crime que tendrá estreno este 11 de febrero, cuenta la historia de una mujer llamada Anna Sorokin una socialité alemana nacida en Rusia que estafó a bancos, hoteles y conocidos ricos por cientos de miles de dólares mientras pretendía estar trabajando arduamente para recaudar fondos para crear su propia fundación.
Pero, ¿quién es realmente Anna Delvey? En 2013 Anna Sorokin se mudó a la gran manzana, Nueva York, donde con su nombre falso, Sorokin fingió ser una mujer de alcurnia para establecerse en la escena social de NY.
Nació en la ciudad de Domodedovo, cerca de Moscú, en enero de 1991 y se mudo a Alemania en 2007 cuando tenía 16 años. Sus raíces vienen de medios humildes, pues su padre trabajaba como camionero y su madre era propietaria de una tienda de conveniencia antes de convertirse en ama de casa.
Su nombre fue conocido hasta que en 2017 la Oficina del Fiscal de Distrito de Manhattan comenzó la investigación por casos de fraudes multimillonarios.

De país en país, Anna se mudo a Londres en 2011 para estudiar en la universidad Central Saint Martins, después regresó a Alemania y luego se mudo a París para iniciar su pasantía en Purple, una revista de moda francesa.
Su llegada a París, comenzó a cambiar su vida pues sus padres comentaron no conocer el apellido “Delvey”.
La gran estafa comenzó cuando en la ciudad de Nueva York, Sorkin propuso una idea sobre una fundación llamada “Fundación Anna Delvey” a grandes inversores y accionistas. La idea estaba centrada en un club privado de miembros y una fundación de arte, lo que involucró a Church Missions House, un edificio histórico en Manhattan, para que fuera un salón de eventos de usos múltiples y un estudio de arte.

Al no tener éxito, Sorkin empezó a crear estados fantasma, es decir, estados de cuenta bancarios falsos para demostrar que tenía un patrimonio que la respalda con unos 60 millones de euros almacenados en cuentas bancarias suizas.
También, comenzó a relacionarse con personas muy ricas de la alta sociedad y les pedía que pagaran hoteles de cinco estrellas, vuelos, comidas en restaurantes caros prometiendo devolver el dinero, pero luego tenía demencia y se olvidaba de estas deudas. Y esto no fue todo, la estafadora logró registrarse en hoteles con tarjetas de crédito que no funcionaban y acumulo decenas de miles de dólares en cuentas sin pagar.

Finalmente al ser descubierta, el 3 de octubre de 2017 fue arrestada en una operación encubierta. Apareció en el Tribunal Penal de la ciudad de Nueva York en diciembre de 2018 y en 2019 se enjuició. Al final se declaró culpable de ocho cargos, incluido hurto mayor en segundo grado, intento de hurto mayor y robo de servicios.
Hoy en día Anna Sorokin se encuentra deportada, pues ha sido contactada por los agentes de ICE debido a que su visa había expirado y ella estaba de manera ilegal. El 11 de febrero de 2021 fue liberada y supuestamente pudo pagar su estancia en un hotel de Nueva York gracias a la serie de Netflix quien pagó más de 300,000 dolares para obtener los derechos de su historia.
