Moda
George Michael nos abandonaba para siempre el 25 de diciembre. Y es que solo los grandes mueren en fechas tan especiales. En un día en el que las familias se unen para demostrarse su amor, la muerte del cantante parece un guiño a sus sabías palabras sobre el mejor y peor sentimiento del mundo.
En un mundo plagado de clichés románticos, George Michael expresó como nadie muchas de las situaciones a las que nos hemos enfrentado tanto en el amor, como en el maldito desamor. He aquí las cinco lecciones románticas más sabias que el cantante nos ha dejado como legado. ¡Gracias, George!
- Nunca te vayas de una cama sin despedirte
Wake me up, before yo go, go, en español, «despiértame antes de irte, irte», es el título del mayor éxito de George cuando formaba parte del grupo Wham! Pero vamos a lo que vamos… ¿Qué es eso de huir cual ratas tras un encuentro amoroso-pasional? Da igual que sea un rollo o un romance más estable. Lo de despertarte antes que él y salir de la habitación en modo ninja no mola nada. Ni hacerlo, ni que te lo hagan.
De hecho, fíjate si George la da importancia, que repite ‘irte’ dos veces seguidas. Que eso es como cuando te dice tu amiga: «Me acabo de comprar un jersey bonito». Y tú le contestas: ¿Pero cómo de bonito? «Bonito, bonito», sentencia. Pronunciado dos veces ininterrumpidas ya no hay más que hablar. Hazle caso al cantante y, por lo menos, despídete. Y no vale decirle adiós mientras duerme, que te conocemos.
- No podemos hacer que alguien nos ame
I can’t make you love me, en español, «no puedo hacer que me ames». Esta frase da título a una de las canciones incluidas en su álbum Older de 1996. ¿Lección que nos enseña? Que hay que saber cuando una persona no te corresponde y dejar de sufrir por ella. Tal cual. No aferrarse a amores no correspondidos.
De hecho, el final de esta canción, resume perfectamente lo que debemos hacer cuando estamos enganchados a una persona que no nos ama: «De nada sirve intentarlo. Para mí no es bueno, cariño, sin amor. Todas mis lágrimas, todos estos años, todo aquello en lo que creí, cariño. Alguien me amará». Más razón que un santo, amigas. Más razón que un santo. Lo digo dos veces por lo que os he explicado antes.
- Todos hemos tenido rollos por despecho
Baby, I ain’t Mr. Right, en español, «Nena, no soy el señor correcto», es una de las frases de su canción FastLove, también incluida en el álbum Older. En su letra, George nos habla de ese hombre que busca distraerse con alguna chica una sola noche para olvidar sus problemas.
¿Moraleja? De nuevo, Michael nos lo deja clarinete: «No te aburriré con los detalles, cariño. Incluso yo no quiero perder el tiempo. Digamos que tú, simplemente, podrías aliviar mi mente. Cariño, yo no soy el señor correcto». ¿Quién de nosotras no se ha topado con un chico que solo quiere divertirse un rato para olvidar un mal de amores? Y tú igual, amiga. Lo que hay que aprender de esta canción es que los rollos por despecho son eso. Y ahí deben terminar. No te comas la cabeza, baby.
- Todos nos hemos enamorado de un amigo
We were friends but with time, waht I feel inside for you has changed, en español, «éramos amigos, pero con el tiempo, lo que siento por ti ha cambiado». Esta frase pertenece a la canción If I Told You That del álbum My love is your love (1998) de Whitney Houston, quien por desgracia también nos abandonó en 2012. Y es que, queridas, ¿quién no se ha enamorado nunca de un amigo? Ese chico con el que te has criado y al que quieres como a un hermano, de repente se convierte en alguien especial para ti y no sabes si decírselo o no. Pues ahí esta el quid de la cuestión.
Según Michael y Whitney, lo mejor es arriesgarse y ver qué pasa con el tiempo. Yo de vosotras les haría caso.
- Todos nos hemos sentido tontos queriando a alguien
Kissing a fool, en español, «besando a un tonto», es el título de una de las canciones de su álbum Faith (1987). ¿Acaso no nos hemos sentido tontos muchas veces al amar con locura a alguien? Sea justificado o no ese sentimiento, George Michael nos insta en esta canción a no dejar de creer en el amor, aunque a veces duela.
«Recojo las piezas y recompongo mi corazón», canta George. Una frase que resume a la perfección el juego del amor. Ganes o pierdas, levántate y recompón tu corazón.
¡Gracias George!