¿Qué es la astenia otoñal?

La astenia otoñal es la sensación de cansancio, fatiga corporal, debilidad, desgana o apatía y surge como consecuencia del cambio de estación. Al cuerpo y a la mente le cuesta adaptarse a los nuevos horarios, a los días más corto y menos luminosos. De ahí ese cansancio o agotamiento mental y físico.

Si bien los síntomas de la astenia otoñal no son graves y, normalmente, van desapareciendo poco a poco conforme el organismo va adaptándose a los cambios, se pueden tomar cartas en el asunto y ayudar al cuerpo con suplementos alimenticios para afrontar mejor la llega del otoño y lo que eso conlleva: menos luz solar, cambios de temperatura y rutina.

¿Cuáles son las causas principales de la astenia otoñal?

La astenia otoñal se produce como consecuencia de los cambios de temperatura, de la reducción de horas de sol y, por tanto, los días se vuelven más cortos y hay menos luz. Además, vuelve la rutina. Todo esto hace que la producción de melatonina se adelante (hormona implicada en la regulación del ciclo circadiano), además de producirse menos serotonina (hormona implicada y relacionada con la felicidad). Esto hace que el organismo tenga que adaptarse y, con ello, aparezca ese cansancio del que hablábamos. A lo anterior debemos sumarla que es la época de los resfriados. Al descender las temperaturas, llegan las lluvias, el frío y el viento y, con ello, aparecen los catarros y las gripes.

Síntomas comunes de la astenia otoñal

• Somnolencia
• Apatía
• Cansancio
• Debilidad
•  Falta de apetito o exceso
• Disminución de la libido
• Tristeza
• Irritabilidad
• Cambios en el estado de ánimo

¿Cómo se puede tratar la astenia otoñal?

Llevar una dieta sana y equilibrada es muy importante para recibir todos los nutrientes necesarios para el buen funcionamiento del cuerpo y la mente, además de fortalecer el sistema inmunológico. Una dieta saludable y variada tiene que contener frutas, verduras, proteínas y escasos azucares y grasas saturadas. Es muy importante reducir el consumo de alcohol, tabaco y estimulantes como la cafeína.

Dormir un número suficiente de horas, está recomendado ocho horas al día, es muy importante. Además, se recomienda adelantar la hora de acostarse y adelantar la hora de levantarse para aprovechar las horas de luz.

El ejercicio físico también es importante para, además de estar sanos por dentro y por fuerza, liberar estrés y aumentar la segregación de endorfinas, que son neurotransmisores que contribuyen a mejorar el estado de ánimo y a conseguir un estado pleno de bienestar.

Por último, se recomienda aprovechar la luz solar. Se recomienda exponerse unos 10 o 15 minutos diarios sin protector para una correcta síntesis de vitamina D. Lo ideal es hacerlo en brazos o piernas, y no en el rostro, para evitar manchas y signos de envejecimiento prematuro.

*Imagen: Unsplash