Moda
Amigas, familiares y, sobre todo, redes sociales nos llevan avisando desde hace unos años de que “las bodas ya no son lo que eran”. Ahora la invitación a un enlace supone la posibilidad de acudir a una fiesta para compartir una experiencia. Cualquier pareja que se case busca la diferencia particular con el objetivo de lograr un evento único e irrepetible. Como dicen Marta y Josep, las cabezas pensantes de La Puta Suegra, “las bodas se entienden como una fiesta de verdad, realmente diferente”.
No obstante, también están en constante evolución y cada temporada aparecen nuevas tendencias; de modo que para 2017 se avistan cambios. Como aclara Bea, la fundadora de Nara Connection, “la tendencia de las bodas americanas nos había invadido, con la diferencia de que allí son muy familiares y en España no bajamos de los 250 invitados. Para conseguir ese aspecto y darle presencia total, la inversión en decoración ha sido bastante elevada, y este año la especialización va en otro camino”.
Pero ¿qué nos vamos a encontrar? Y, sobre todo, ¿qué hay que tener en cuenta a la hora de organizar una boda en 2017?

- Colores frescos y naturales
Así lo manifiesta Paloma, de La Foresta: “Este año se impondrá con más fuerza el estilo natural”. Cada vez se tiende más a evitar los espacios cerrados y a disfrutar más de lugares abiertos. A esto, Wendy de Bodas de Cuento añade que el 2017 trae “colores frescos y vibrantes” a las celebraciones.

- Lugares distintos
Esta es la clave que sigue Cristina de Cristina and Co: casarse en entornos menos convencionales, en “sitios que tengan un valor emocional para los novios y en los que se pueda crear un escenario de cero”. Una idea que corrobora el equipo de Lalablu. Nuria, su directora, precisa que sean lugares fuera de lo común: “Fincas con aire campestre, naves industriales, invernaderos, lugares con presencia histórica o incluso en un teatro”.


- ¿Aire rústico? No, gracias
“Ya pasó la fase de bodas vintage y rústicas porque sí, sin importar muchas veces si eso tenía que ver con la pareja o iba bien con el espacio donde se celebraba. Lo recargado y superfluo deja paso a lo minimal y sencillo, lo natural vuelve”, confirma Wendy de Bodas de Cuento.

- El cócktail se impone
“Estamos en España, la parte más importante sigue considerándose la comida”, matiza Laura de Susanna Príncipe. Eso sí, los novios apuestan cada vez más por un buffet, antes que por el repetitivo banquete. La interacción es más fácil y se consigue más fácilmente el aire festivo que la ocasión merece. “La cocina en directo al aire libre o showcooking es una apuesta segura”, dice Laura. «Con estos ambientes más ágiles y menos formales se consigue una fácil interacción entre sí», puntualiza Paloma de La Foresta. “Y foodtrucks para darle un toque menos serio”, exclama Nuria.


- El alcohol no se olvida
Tampoco hay que olvidar la barra libre: “Ya no es una tabla de madera con vasos y botellas. Ahora se presta mucha atención a ese espacio: los invitados van a estar un mínimo de cuatro horas de fiesta, por lo que la calidad del alcohol, los detalles de las barras, la calidad del sonido, la iluminación y por supuesto, la selección musical, son puntos que, si bien antes no se les prestaba gran importancia, ahora tienen un protagonismo absoluto”, dice Bea.

- El nuevo protocolo a la mesa
Se presta especial atención a la mesa, en la que esta temporada veremos centros más pequeños, cristalerías antiguas y vajillas en las que se mezclan diferentes piezas. Además, en la decoración de la misma tomarán gran protagonismo los detalles provenientes del bosque: eucalipto, musgo, cactus…



- La decoración se empieza por el tejado
Los techos adquieren mucho protagonismo: “Las decoraciones en cascada o lluvia de flores no dejarán indiferentes a los invitados”, dicen desde La Foresta. Y muchas velas, “para sumar un toque romántico a la celebración”, certifica Bea de Nara.


- Y la mejor tendencia: sed vosotros mismos
¿Dónde plasmar sus rasgos? En la decoración, una suma de detalles que hace que los enamorados busquen esa experiencia anhelada en el día de su boda.
Lo decíamos al principio: hay un universo nupcial a un click de nuestra mano. “Ahora mismo, con todos los blogs de bodas y la exaltación del mundo nupcial en las redes sociales, es fácil perder el foco de lo importante. Lo bueno de Instagram y Pinterest es que son fuentes muy inspiradoras y potencian el trabajo de todos los que nos dedicamos a esto”, detalla Bea. Pero no hay que seguir todo lo que dictaminen las redes. Porque, así como no hay dos parejas iguales, tampoco habrá dos bodas exactas. O al menos eso es lo que se espera: por mucho que se quiera copiar el estilo de otro enlace visto en las revistas, foros o webs, la personalidad de los contrayentes es lo más importante.
“Muchas parejas se frustran porque quieren poner todo lo que les gusta de otra boda, pero eso no implica que tenga que estar impepinablemente en la suya”. Por eso, la fundadora de Nara puntualiza que es necesario siempre la reunión para conocer su estilo y plantearles un proyecto ex profeso. “Cuando vean el resultado, se alegrarán de no haberse dejado llevar por las tendencias y haber optado por hacer algo que realmente les represente a ellos”.

Wendy, de Bodas de Cuento, asegura que “en todas las bodas hay que renunciar siempre a algo, siempre». Por eso, priorizar es importante. “A partir de ahí, ya sale todo”. Los números no deben asustar. El equipo de Lalablu lo deja claro: “Contar con un presupuesto limitado no es impedimento para lograr la boda de tus sueños, pero es fundamental ir construyendo la ceremonia de manera ordenada y pensando en ella de una manera global”.
“Es difícil hacer bodas diferentes”, expone desde La Puta Suegra. “Cada pareja prioriza una cosas, pero contar con profesionales del sector es importante, independientemente del presupuesto. Sobre todo, porque los novios tienen que disfrutar y no estar pendientes de la producción del evento”.

[galeria]