Moda
Spoiler: no necesitas heladera (o quizá sí, ya veremos), solo ganas de sobrevivir a la ola de calor con estilo y buen gusto. Porque cuando el termómetro se sube a la cabeza y la energía baja a los pies, el cuerpo no te pide dieta, te pide un helado. Mejor si es casero, natural y tan bonito que podrías subirlo a stories sin filtros.
Aquí van 5 recetas de helados naturales fáciles, saludables y con sabor a verano elegante. Los puedes hacer en casa, congelar en moldes monos (puntos extra si usas los de silicona de diseño escandinavo) y servir en copa o directamente desde la batidora. Tú decides el mood.
Helado cremoso de fresa y yogur griego (o el clásico cool)
Sabe a desayuno de hotel, pero en versión polo.
Ingredientes:
- 200 g de fresas naturales
- 2 yogures griegos sin azúcar
- 1 cucharada de miel o sirope de agave
- Unas gotas de zumo de limón
Elaboración: Tritura todo junto hasta obtener una textura sedosa, viértelo en moldes y congela de 4 a 5 horas.
Tip Grazia: Añade virutas de chocolate negro antes de congelar para subir el nivel sin esfuerzo.
Mango-lassi helado (directo desde tu spa mental)
Con un pie en la India y otro en tu terraza. Exótico, hidratante y muy chic.
Ingredientes:
- 1 mango muy maduro
- 1 yogur natural o de coco
- Un chorrito de zumo de lima
- Unas hojas de menta (opcional)
Elaboración: Tritura, congela y disfruta. Puedes presentarlo en vasitos con topping de semillas de chía o coco rallado.
Mood: perfecta excusa para ponerte ese pareo que compraste «por si acaso».
Banana-choco sin culpa (y sin azúcar añadido)
Para esos días en los que necesitas helado y abrazo, en un solo bocado.
Ingredientes:
- 2 plátanos maduros congelados
- 2 cucharadas de cacao puro
- Un chorrito de leche vegetal (almendra o avena)
- 1 cucharadita de crema de cacahuete
Elaboración: Tritura hasta que parezca helado italiano. Listo para comer en el momento o congelar como polo.
Grazia hack: Añade flor de sal por encima para hacerlo aún más instagrameable.
Sorbete detox de limón y jengibre
Limpio, refrescante y con el mismo efecto que un chapuzón en el mar a las 9:00 a. m.
Ingredientes:
- Zumo de 3 limones
- 2 cucharadas de sirope de agave
- 1 vaso de agua
- 1 rodaja de jengibre fresco rallado
Elaboración: Mezcla, congela en bandeja y raspa con un tenedor para hacer granizado. Sirve en copa con hojas de menta.
Vibe: lo sirves en la cena y te conviertes en anfitriona del verano.
Helado express de frutos rojos y leche de coco
Vegano, rápido, bonito. Todo lo que le pedimos al verano.
Ingredientes:
- 200 g de frutos rojos congelados
- 1/2 taza de leche de coco fría
- 1 cucharadita de vainilla natural
- 1 cucharada de sirope (si los frutos son muy ácidos)
Elaboración: Batidora potente, textura cremosa, servir inmediatamente.
Grazia tip: añade granola crujiente para convertirlo en merienda deluxe.
tu nueva aliada viral
La habrás visto en redes porque desde el verano pasado se ha convertido en un hit en tu cocina, y más cuando las temperaturas suben como ahora. Se llama Ninja CREAMi y con una sola máquina prepararás en casa tu helado favorito de siempre o bajo en azúcar, sin lácteos, cetogénico o vegano… Y, si te atreves, además de postres y delicias frías dulces, también podrás hacer delicias frías saladas: sorbetes de gazpacho o de vichyssoise.
Lo mejor es que es súper fácil de usar, solo tienes que rellenar, congelar, batir y servir: solo tendrás que rellenar una tarrina con tus ingredientes favoritos y congelarla durante 24 horas. Pasado ese tiempo, podrás procesar esta mezcla congelada rápidamente con tu CREAMi.
Puedes elegir entre la versión Ninja CREAMi Deluxe NC501EU (299,99 euros) o la Ninja CREAMi NC300EU (ahora a 229,90 euros).
Aunque te parezca una inversión algo elevada, no lo negamos, lo bueno de la CREAMi es que puedes usarla todo el año, no solo en verano. ¿Cómo? Pues por ejemplo preparando smoothie bowls para el desayuno, yogures helados en la merienda o tus batidos favoritos. Solo tienes que darle rienda suelta a tu creatividad o seguir las recetas que te ofrece Ninja en su web.
Ya sabes, este verano el helado se hace en casa, se toma con gafas de sol puestas y se sirve como quien saca una vela aromática: con estética y propósito. No hace falta ser chef, solo tener ganas de enfriar el cuerpo y cuidar el paladar. Y si hay fotos, que sean en tonos pastel y con cucharilla dorada.
*Imágenes: Pexels y cortesía
