Moda
Feminismo y neutralidad de género; Maria Grazia Chiuri empodera sus diseños para Dior con voceras que no quitan el dedo del renglón.
La semana pasada, la duquesa de Sussex viajó a Marruecos y dentro de su extenso guardarropa había un vestido kaftan Dior. Meghan Markle, como la feminista declarada de la realeza británica, estaba ahí para empoderar a las nuevas generaciones de mujeres a ser independientes. Esto, un pilar sólido dentro de la estética de Maria Grazia Chiuri, directora creativa de la maison.
El espectáculo de la casa parisina empieza a las afueras del Musée Rodin; en esta ocasión fue la artista y poeta italiana, Tomaso Binga, la encargada de crear el arte. D-I-O-R leían las fotografías colgadas a la entrada del recinto que, en las palabras de la firma, “cada una representa a una mujer distinta”. Por dentro, la misma estética escribía y resaltaban términos clave para comprender la correlación entre la entrega y la creatividad de Binga —el proyecto fue fotografiado por Verita Monselles—.
Ahora que el género ya no es una barrera para expresar una personalidad auténtica, Maria Grazia enfatizó en la neutralidad. Para empezar, Tomaso Binga es el nombre artístico de Bianca Pucciarelli Menna. En un mundo dominado por el machismo, el pseudónimo hace frente al paraíso reservado para los hombres como una especie de personaje infiltrado. Aquí el discurso atrevido comienza a entrelazarse a través de la colección que caminó por la pasarela. Al igual que las Teddy Girls, esa subcultura que nació en Londres y que en los cincuenta impuso el estilo andrógino como rebelión al final de la Segunda Guerra Mundial, la identidad visual se cierne por sí sola.
Lo antes descrito se tradujo en la mente de Chiuri con telas vaporosas, cuero, tartan, tweed, acolchados y, muy importante, el emblemático toile de jouy. A simple vista, el espíritu rebelde se alcanzaba a percibir con la mezcla de colores imponentes y desenfadados, pero que hacían perfecto sentido. Y siempre acentuando la cintura —ya sea por medio del icónico New Look o por los cinturones de piel con el monograma de la casa— la diseñadora italiana se propuso innovar con la sastrería inspirada en Savile Row, entregando feminidad en cada prenda.
Cuando se trata de cimientos andróginos, Maria Grazia Chiuri sabe en dónde encontrarlos para cada temporada. Pensando en la estandarización social, la entrega de Dior es un sueño muy elevado para las generaciones que siguen teniendo el control. Por suerte, hay voceras que no quitan el dedo del renglón.