Cuando el pasado viernes Taylor Swift nos deleitó con una foto de su nueva melena en Instagram, nos dejó con la boca abierta… y ganas de más. Su bob, ahora platino, coincidiendo con la salida de su nueva portada para Vogue América, nos pareció ma-ra-vi-llo-so viniendo de alguien que, hasta ahora, nos había acostumbrado a una estética dulce y lady. Pero,¡ ¡¿cómo narices iba a encajar ese desteñido con sus shorts cincuenteros, sus cropped tops y sus vestidos naíf?! ¿Cómo se las iba a apañar para que el mundo (ese que este fin de semana veía su timeline invadido por Coachella) tomara en serio su cambio de look?! Fácil: llevándolo al extremo.

Taylor Swift en Coachella, con (muchos) amigos y melena rubio platino. © Instagram @taylorsiwft
Taylor Swift en Coachella, con (muchos) amigos y melena rubio platino. © Instagram @taylorsiwft
© Instagram @taylorsiwft
© Instagram @taylorsiwft

Durante los últimos tres días, Taylor se ha rendido al grunge de la cabeza a los pies… nunca mejor dicho: arriba, una melena desgarbada rubia platino; abajo, zapatillas iridiscentes. Que sí, que es oficial, o eso queremos pensar: se acabó el reinado del boho en el festival de Indio; lo sentimos por Alessandra Ambrosio, pero ya nos hemos cansado de ver cada día, cada edición, cada-maldito-año, lo mismo. Por eso, hemos decidido que el de TayTay (a falta de una Alexa, una Kruger y una Bosworth este año -emoji triste todo el rato-), es el mejor look de este fin de semana de desmadre californiano. Así que… a copiar en el SOS4.8., que la temporada en España está a punto de empezar:

[galeria]