En su última presentación para la colección Otoño 2024, Tory Burch transformó el atrio de la icónica Domino Sugar Factory en un escenario inesperado: un oasis acuático elevado, donde el suelo y las paredes de azulejos color aqua crearon la ilusión de estar sumergidos a doce pisos de altura.

Esta ambientación no fue casualidad; Burch habló tras bastidores sobre la dualidad que la inspiró: “poder y gracia, precisión y libertad”, conceptos que resonaron a lo largo de la colección y que, según la diseñadora, evocan un cierto “fiebre olímpica” que la llevó a reflexionar sobre el deporte.

Tory Burch no es ajena al mundo deportivo; lanzó Tory Sport hace seis años, pero esta vez su enfoque se centró menos en el rendimiento y más en la estética. Desde el calzado hasta las prendas, la colección exploró cómo lo deportivo puede integrarse con lo elegante.

Aunque los zapatos eran una excepción en su diseño más sofisticado, la colección estuvo impregnada de elementos atléticos. Los trajes de baño tipo tank y los pantalones de karate con cintura ajustable por cordón fueron las piezas más claramente inspiradas en el deporte.

Otros elementos, como los vestidos de jersey con paneles contrastantes en los hombros, evocaron el espíritu del fútbol americano, mientras que las camisas de gasa de lana elástica, con rayas verticales, hacían un guiño sutil a las camisetas de fútbol del resto del mundo.

Las piezas más sorprendentes fueron las faldas con cinturas de alambre maleable que, en lugar de ceñirse al cuerpo, se arqueaban hacia afuera, añadiendo volumen a la cintura, una zona que tradicionalmente las mujeres prefieren estilizar.

En contraste, los pantalones de lana estrechos con delicadas motas y una caída que cubría elegantemente los pumps, combinados con chaquetas acolchadas de lana y seda, ofrecieron una silueta más refinada y moderna.

El desfile culminó con un trío de looks que combinaban camisetas musculosas sin mangas con faldas asimétricas drapeadas en jersey, creando un balance perfecto entre la fuerza y la delicadeza, la estructura y la fluidez.

Con esta colección, Tory Burch demuestra una vez más su habilidad para fusionar lo inesperado, transformando la moda deportiva en un arte elevado.

*IMAGEN: Google Images