La caída del cabello estacional suele coincidir con la llegada de la primavera y el otoño, momento en el cual los mamíferos cambian de pelaje para adaptarse a los cambios de temperatura propios de cada estación. Ciertamente los seres humanos hemos evolucionado, manteniendo este proceso más estable durante todo el año. No obstante, la pérdida de cabello estacional es mínima si se compara con otros factores que provocan la pérdida de pelo, y que pueden acabar generando alopecia. Entre ellos destaca la herencia genética, el estilo de vida (estrés, malos hábitos nutricionales, cansancio, etc.), el uso de algunos tratamientos farmacológicos, los efectos de algunas enfermedades…

Además de la caída estacional del cabello (que se acentúa con la llegada del otoño) hay otro problema relacionado que preocupa de manera general a la población: nos referimos a la alopecia androgénica, también conocida como calvicie común, que afecta hasta a un 45% de los hombres y casi a un 10% de las mujeres.

Se trata de una alopecia de base hormonal que consiste en la miniaturización progresiva del folículo piloso que está provocada, en gran parte, por un aumento en la actividad de DHT (dihidrotestosterona), metabolito activo de la hormona testosterona en el cabello.

¿Por qué se nos cae el pelo?

Existe una enzima, la 5 alfa reductasa, que se encuentra en el organismo y es la encargada de transformar, mediante procesos metabólicos, la testosterona libre en una forma de testosterona más potente y activa, conocida como dihidrotestosterona. Comúnmente se le conoce con sus siglas DHT.

La presencia de DHT se relaciona como la causa principal de la alopecia androgénica. Esto se debe a que la DHT se une a los receptores de andrógenos situados en los folículos pilosos, iniciando un proceso conocido como miniaturización progresiva del folículo piloso y desembocando, finalmente, en la pérdida definitiva del cabello. Dado que la DHT es el factor desencadenante, si evitamos o reducimos sus niveles, podremos ayudar a retrasar o frenar la caída del cabello.

¿Cómo evitarlo?

Existe también un activo único llamado Saw palmetto, perfecto para luchar tanto contra la caída del cabello estacional como contra la alopecia androgénica, Olyan farma, laboratorio dermatológico experto en productos sanitarios y en el cuidado de la piel, consciente de este problema, propone el tándem perfecto para tratarlo con su champú y cápsulas Hairgen®, dos productos que actúan en sinergia de una forma eficaz gracias a un activo único: el Saw palmetto  que actúa de forma similar al finasteride, al ser un inhibidor de origen natural de la enzima 5 alfa reductasa.

El Saw palmetto, también conocido como Serenoa repens (SR) o palma enana, es una pequeña palmera nativa de las regiones orientales de los Estados Unidos. Su extracto es un antiandrógeno muy eficaz, ya que contiene fitoesteroles y ácidos grasos como ingredientes principales. Además, es utilizado en varias formas de medicina tradicional a base de hierbas.

Olyan farma ofrece dos productos perfectos para evitar la caída del cabello. Por un lado está Hairgen® Champú, con un precio de 19,90 euros, y por otro Hairgen® Cápsulas, con un precio de 34,30 euros, y en ambos encontramos como activo principal el saw palmetto.

 

*Imágenes: cortesía de Olyan farma y Unsplash