¿Sabías que los brotes de acné, o puntos negros podrían ser causados por no tener una correcta limpieza de tus brochas? Si tu respuesta es que no, espera a leer lo que te contaremos.

Sabemos que seguramente si estas leyendo esto eres una amante de la belleza y si es así te queremos contar que el cuidado de tu piel incluye lavar tus brochas después de maquillarte, de lo contrario podría perjudicar la salud de tu piel. Las brochas de maquillaje almacenan polvo, bacterias y suciedad, lo que se traduce en que si no se limpian al menos dos veces por semana, llevarlas al rostro causara que tus poros se tapen, salgan los famosos puntos negros debido a la suciedad que se deposita en el rostro, así como acné e irritabilidad de tu piel. Y si de tus ojos hablamos, puede causar conjuntivitis. Es por eso que te recomendamos tener un lavado adecuado de ellas y no arriesgar la salud de tu piel, a continuación te contamos cómo:

Paso 1

Lávalas a mano con un jabón de PH neutro, nunca con jabón de trastes pues este puede dañarlas,

Paso 2

No dejes que el agua traspase dentro del mango de la brocha, ya que esto puede mezclarse con el pegamento y no es lo que buscamos.

Paso 3

Toma cada una de tus brochas a la vez que vas realizando movimientos circulares ya sea en una plantilla especial para lavado de brochas o si se te complica en tu propia mano, la clave es ir sacando poco a poco la suciedad.

Paso 4

Cuando hayas terminado de lavar una a una retira el exceso de humedad cuidadosamente con una toalla y te aconsejamos dejarlas secar al aire libre. Por lo regular su proceso de secado tarda de uno a cuatro días depende el tipo de pelo de la brocha y cuan gruesa sea.

Realizar este proceso dos veces por semana hará que el aspecto de tu piel mejore y te olvides de los puntos negros y acné, ¿Te unes a hacerlo?

*Imagen: Getty Images