Todos hemos oído hablar del multitasking como el poder de hacer varias cosas a la vez, sin embargo, parece que eso no es muy sano que digamos.

Es por eso que algunos expertos recomiendan el monotasking, es decir, hacer una sola cosa a la vez, sin interrupciones. O sea, dejar de lado las distracciones hasta haberla concluido.

De hecho, el monotasking es la base de una filosofía que utiliza la atención plena.

Nuestra mente no está diseñada para hacer varias cosas a la vez. El Homo sapiens dividiera su atención para sobrevivir. Por eso cuando hacemos más de una cosa a la vez, alguna saldrá mal.

De hecho, la palabra multitasking viene del lenguaje tecnológico, ni siquiera fue usado para referirse al ser humano. Se acuñó en una descripción de 1965 de la computadora IBM System/360 que tenía la capacidad para operar varios programas a la vez.

Earl Miller, profesor de neurociencia en el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), dijo que el multitasking es cambiar de una tarea a otra compulsivamente.

Solo una cantidad muy reducida de personas puede hacer realmente varias cosas a la vez sin fallar en ninguna y se les llama supertasker. Según un estudio realizado por la Universidad de Utah en 2010, solo el 2,5% de la población tiene esa capacidad.

El costo de querer hacer varias actividades conduce a la frustración, la acumulación de tareas, estrés, presión y la imposibilidad de pensar en profundidad. Es difícil innovar si no podemos concentrarnos por varios minutos en algo.

Thatcher Wine escribió el libro El método de las 12 monotareas dijo que el multitasking se ha considerado incluso una virtud.

“Durante años, el multitasking se ha considerado una habilidad de la que presumir, pero la mayoría solo aparentamos que podemos hacerlo; realmente no estamos logrando más”, dijo.

“El resultado del multitasking constante es que acabemos quemándonos. Gracias a la ciencia, ahora sabemos que alcanzamos el óptimo rendimiento cerebral con el monotasking y dedicando nuestra concentración a una sola cosa a la vez”, agregó.

Practicar el monotasking

Para practicarlo solo hay que ser intencionales en hacer una tarea a la vez, prestando atención, con la concentración y el compromiso renovados, y, sobre todo, deshacernos de lo que nos distrae.

Dejar el celular en otra habitación, no revisar el email o las redes sociales.

Dedicar un horario para trabajar concentrado y sin distraerte. También podría ayudar buscar un lugar cómodo y agradable para llevar a cabo las tareas, pero esta vez, una por una.