Louis Vuitton ha hecho lo que mejor sabe hacer, y ha dado un golpe de autoridad en Milán con la apertura de su renovada tienda flagship en el Neoclásico Palazzo Taverna, una joya arquitectónica ubicada en la exclusiva Via Montenapoleone. 

Como la Maison ha expresado, esta tienda es una declaración de amor a Italia, su diseño y su tradición gastronómica.

Por lo tanto, la boutique también cuenta con una experiencia culinaria de tres estrellas Michelin. Louis Vuitton ha sellado una alianza con Da Vittorio, el restaurante de la familia Cerea, para abrir su primer restaurante y café en Italia dentro de la boutique.

El menú tiene desde caviar con mousse de papa y manzana caramelizada, hasta una charlotte de frutas de temporada con vainilla de Madagascar. La experiencia gastronómica se completa con el Da Vittorio Café, un oasis verde en el antiguo patio central del Palazzo Taverna, donde se sirven creaciones como un croque monsieur con tres tipos de jitomate y pesto.

Diseñada por el arquitecto Peter Marino, esta tienda se sumerge en la estética inconfundible de Louis Vuitton y rinde homenaje a la elegancia de Milán. 

El interior evoca la atmósfera de una auténtica casa de la región, con galerías abiertas rodeadas de vegetación colgante y un tragaluz de vidrio que inunda el espacio con luz natural. El lujo aquí es tangible: la carpintería fue realizada por artesanos locales y la decoración mezcla muebles restaurados de diseñadores como Gio Ponti y Osvaldo Borsani, con piezas contemporáneas de artistas como Mimmo Paladino y Carla Accardi.

“Milán es un destino clave para nosotros, no solo por los clientes italianos, sino también por el turismo de lujo que sigue en ascenso”, dijo Pietro Beccari, CEO de la marca.