Moda
Miley Cyrus acaba de anunciar, Instagram mediante, que este año ella será la encargada de conducir la gala de los Video Music Awards (VMA) que se celebrará el 30 de agosto en Los Ángeles.
La ceremonia de los MTV encargada de premiar a los mejores videoclips del año tiene una relación de amor-odio con la polémica cantante de Nashville. Si en la edición del año pasado se alzaba con el premio al mejor vídeo por su desnudo trabajo en Wrecking Ball, en la gala del 2013 se encargaba de revolucionar al mundo entero enseñándonos lo que era en realidad el Twerking (y cómo bailar lo más desnuda posible sobre un escenario y ante una audiencia de varios millones de atónitos telespectadores).
Así que, si se trata de dar que hablar y convertir la noche en el Trending Topic del verano o del año, go Miley, go!, sabemos que la artista cumplirá todas las expectativas. Algunas las damos por hecho, otras se las pedimos encarecidamente desde aquí. Concretamente estas:
- Que no enseñe la lengua cada cinco minutos.
Sabemos que es difícil, misión casi imposible. Pero, sinceramente, Miley: tu lengua es taaaaaaan 2013. En el 2015 ya no es bonito, no es gracioso y, sobre todo, no es sexy (vale, tampoco lo era hace dos años, pero se lo pasábamos por alto por la novedad y eso).
- Que luzca todo un despliegue de vestuario firmado por Jeremy Scott y Marc Jacobs.
Ambos diseñadores, entre los favoritos en su guardarropa, le suministran los looks que mejor la definen. La ropa de Scott le potencia su parte gamberra y desvergonzada; la de Jacobs la sexy y lánguida.
- Que no se olvide del smiley.
La cara amarilla sonriente se ha convertido en una de sus imágenes favoritas; tanto, que sería mejor llamarle Smiley Cyrus. Este icono también es el estandarte de su fundación The happy hippies (HH) y lo lleva en camisetas, vestidos, bolsos, pegatinas, calcomanías… También la luce en forma de pendientes como en este vídeo en el que canta con Joan Jett.
- Que se entregue a la lycra.
Como si no hubiera un mañana y nos regale memes tan inolvidables como los que surgieron tras la pasada gala del Met. Mallas, tops, bañadores, bodys... Todo.
- Que se rodee de animales sobre el escenario.
Nos valen perros, gatos, cerdos, ponys… Cualquier ser vivo susceptible de generar comentarios positivos y entrañables será bien recibido junto a Miley.
- Que cambie de peluca.
En su cuenta de Instagram suele aparecer con un modelo de corte bob y flequillo. Ya la ha lucido en amarillo, morado o naranja; dependiendo del tono nos recuerda a Scarlett Johansson en Lost in Translation o a Mila Jovovich en El Quinto Elemento. Solo nos queda verla lucir una peluca de color negro para que nos evoque a Mia Wallace, personaje de Pulp Fiction interpretado por Uma Thurman.
- Que se disfrace (mucho).
¿¡Qué sería de Miley sin un buen disfraz!? O dos. O tres. ¿Y del resto del planeta celebrity sin la inspiración de Miley para vestir dos meses después en Halloween? De momento, y para anunciar que ella se encargará de presentar la gala, ya nos ha sorprendido vestida de alien. Para la ceremonia queremos más.
- Que aparezcan pizzas y aguacates.
Cyrus se ha vuelto una fanática del avocado, fuente de Omega 3; tanto, que hasta se lo ha tatuado en el brazo. También del pepperoni, manantial de grasa y colesterol, que le acompaña cada vez que se va a la cama porque su juego de sábanas está estampado con este ingrediente.
- Que vuelva a hacer un dueto con Madonna para interpretar Don’t tell me.
El tema, que está incluido en Ray of light, conecta a Cyrus con sus raíces country y devolvería a Madonna a cantar sin utilizar efectos en la voz que le hagan parecer una adolescente. Además a la reina del pop la veríamos vestida de vaquera que es mucho más elegante (¡dónde va a parar!) que los looks a lo colegiala con los que se ha empeñado en sus últimas apariciones.
