Moda

Colombiamoda 2025 fue mucho más que un evento de pasarela. Fue una experiencia sensorial, una declaración de estilo y un escaparate de talento que consolidó a Colombia como uno de los referentes de moda en América Latina. Desde el street style hasta las colecciones más esperadas, cada jornada reveló la diversidad estética que define el presente y el futuro del diseño regional.
El desfile inaugural de Agua by Agua Bendita transportó a los asistentes a un universo de seducción y poesía visual. Las mangas voluminosas, los minishorts y el terciopelo en tonos intensos se combinaron con estampados florales que evocaban la feminidad contemporánea. La propuesta demostró que el traje de baño puede reinventarse como prenda urbana, llevando la estética resort a nuevas alturas de sofisticación.
La Petite Mort, por su parte, sorprendió con una colección inspirada en la tradición silletera. Una oda a la herencia antioqueña que se expresó a través de blazers estructurados, hombreras audaces y una paleta serena de neutros. Cada prenda era una metáfora de raíces profundas transformadas en elegancia.
En otra esquina de la moda, Sea Salt y Socarrás firmaron una colaboración que celebró la libertad corporal y la fuerza femenina. Laura Tobón debutó como diseñadora con piezas tejidas al cuerpo, encajes etéreos y transparencias que transformaron la pasarela en un poema de empoderamiento.
El debut de Francesca Sesana con La Mia Maniera en A Modo Mío dejó claro que el boho ha madurado. Ahora es más conceptual, más elegante, más rebelde. La colección combinó minimalismo con glam rock, fusionando texturas y paletas que desafían lo convencional.
Por último, Sol y Neptuno hizo historia en la pasarela Distrito de Medellín. Su propuesta artesanal reimaginó el denim como símbolo de lujo consciente, con acabados metalizados, pedrería y siluetas que rompen reglas. El diseño emergente colombiano ya no pide permiso: simplemente conquista.
Colombiamoda 2025 cerró con una visión clara. La moda no solo se diseña, se siente, se vive, se transforma. Y en Medellín, todo eso se lleva con orgullo.
*Imágenes: cortesía