Moda

La colección Gucci Pre-Fall 2025 explora la esencia de los años 70, capturando un sentido de libertad ilimitada y fusionándolo con una visión contemporánea del legado de la Casa. Este juego entre el pasado y el presente da nueva vida a los códigos de la marca a través de un lenguaje visual rico en experimentación, artesanía y detalles distintivos.
La grandiosidad casual, sello distintivo del ADN de Gucci, sigue siendo el hilo narrativo de la colección. Las siluetas femeninas y masculinas comparten una base sastrera, pero siguen caminos distintos: sensualidad para las mujeres y facilidad sin esfuerzo para los hombres.
Para las mujeres, la sastrería logra un equilibrio entre precisión estructural y fluidez: chaquetas ajustadas se combinan con pantalones inspirados en la ropa masculina, mientras que acentos como bufandas de cuero y tejidos trompe-l’œil añaden capas de complejidad estética. Cada conjunto encarna una feminidad confiada, donde las raíces históricas y una visión vanguardista se fusionan para redefinir el lujo moderno.
Para los hombres, la sastrería es relajada y sobria, con líneas limpias y proporciones generosas. Blazers de gran tamaño se combinan con pantalones de corte fácil, mientras que camisas de sarga con moños en el cuello aportan un toque lúdico y poco convencional. El resultado es un guardarropa que combina refinamiento con practicidad, manteniendo una interpretación relajada y auténtica de la modernidad.
El motivo Flora, creado por la imaginación de Vittorio Accornero de Testa, se reinterpreta con un giro inspirado en la bandana: el diseño original se coloca sobre las prendas con la precisión de una bufanda. Una versión degradada del original aparece en bufandas anudadas alrededor de la cabeza, mientras que otras muestran símbolos ecuestres como bocados y correas, subrayando el legado de la Casa.
Las prendas exteriores anclan la colección con una exquisita artesanía que fusiona tradición e innovación. Entre los elementos destacados se incluyen el shearling Monograma GG tono sobre tono, chaquetas de cuero texturizado y shearling con efecto terciopelo afeitado, redefiniendo los límites del lujo casual. Desde incrustaciones geométricas hasta acabados interiores, cada detalle celebra la excelencia artesanal italiana, ofreciendo una sensación palpable e intransigente de lujo.
Los accesorios juegan un papel clave. El Jackie 1961, un icono entre los iconos, se reinventa en un contraste de materiales y símbolos de archivo, con ante combinado con la franja Web. El Blondie, con su característico elemento circular, se actualiza en shearling, fusionando elegancia con comodidad. Mientras tanto, el nuevo Gucci Softbit presenta un diseño relajado y minimalista que da un giro moderno al Horsebit. Para las mujeres, los mocasines gruesos con varias opciones de tacón destacan, mientras que los mocasines masculinos introducen detalles como un penny removible y algunos con tachuelas.
La colección se enriquece aún más con joyería audaz, definida por proporciones decisivas y detalles sofisticados: collares y pendientes llamativos completan cada look. Las gafas de sol ultraligeras con montura metálica se destacan con siluetas juguetonas en las lentes y suaves tonos degradados. La paleta refleja la energía de los años 70, con tonos cálidos de tierra iluminados por acentos inesperados.
Gucci Pre-Fall 2025 es una celebración de la libertad y la visión, una colección que mira al pasado para reinventar el futuro, fusionando los códigos clásicos con un espíritu contemporáneo y vivaz. Una invitación a abrazar la moda como una expresión auténtica de uno mismo.
*Imágenes: cortesía