Los últimos acontecimientos de nuestra vida, y seguro que le ha pasado a más de uno, han hecho que no solo cambiemos nuestros hábitos de trabajo, hábitos sociales, también han contribuido a que el insomnio esté más presente en la vida de muchos de nosotros.

Dormir bien es primordial no solo para levantarse descansado y activo, también como parte de una rutina saludable día tras día. Vivimos en un mundo más estresado cada vez, y es complicado muchas veces encontrar la calma, por ello la meditación es una de esas actividades aliadas para conseguirlo, pero no siempre somos capaces de meditar correctamente, y en muchos casos nos cuesta tanto que no lo seguimos intentando hasta conseguir crear el hábito.

Cada 21 de mayo se celebra el Día Mundial de la Meditación, y por tal motivo hemos hablado con los expertos detrás de un nuevo dispositivo analógico -sí, has escuchado bien, analógico- llamado Morphée y con el que dormir bien, introducirse en el mundo de la meditación o simplemente encontrar un momento de relajación, es mucho más fácil. Hablamos con Guillaume Barathon y Charlie Rousset, quienes han diseñado un plan con el que cualquiera de nosotros puede iniciarse en esta técnica.

Plan para aprender a meditar

Como nos recuerdan desde Morphée, está demostrado que meditar ayuda a reducir el estrés, a calmar la mente y a controlar las emociones. Así que, toma nota porque con estos 7 sencillos pasos vas a crear nuevos hábitos y energías en nuestra vida.

1.-Elegir un lugar en el que nos desconcentrarnos

Es muy importante encontrar un lugar tranquilo, sin ruido, sin interrupciones, para poder tener una meditación completa.

2.- Controlar la respiración es fundamental

Concentrarnos en nuestra respiración es el primer paso, pero si te cuesta puedes ayudarte con Morphée, ya que cuenta con sesiones específicas centradas en la respiración.

3.- Elegir una postura cómoda

Si no te sientes cómoda tratando de meditar, no lo vas a conseguir porque esa incomidad no te va a dejar. Elige una postura, la más adecuada es la posición de loto.

4.- Empieza poco a poco

Si pretendes convertirte en un experto en dos días, eso no va a pasar. Lo importante es ir aprendiendo de manera progresiva, y aumentando en cada sesión los minutos en tus sesiones.

5.- Crea una rutina

No sirve un día sí y cinco no, porque lo más importante es crearte el hábito. Los expertos recomiendan que en esta rutina sea siempre a la misma hora, por ejemplo temprano para empezar bien el día, de noche para dormir relajado, etc.

6.-Acepta tus pensamientos, aunque te desconcentres

Algo que ocurre muy a menudo es que, cuando tratamos de estar concentrados, nos vienen mil pensamientos y nos sacan de nuestro centro. No luches contra ello, asúmelo y poco a poco conseguirás tener tú el control.

7.- Combina tus sesiones de meditación con yoga y/o pilates

Si combinas todas estas prácticas, progresivamente vas a conseguir tu propósito: reducir tus niveles de estrés, ansiedad y descansar mejor.

¿Qué es Morphée?

Como te comentábamos al principio, es un dispositivo analógico que está dando mucho que hablar, y no solo por ser analógico en un mundo cada vez más digital. El objetivo de este nuevo objeto de deseo es convertirse en nuestro gran aliado para que consigamos volver a dormir plácidamente.

Si estás harto de pantallas, Morphée ha sido creado para que, a través de sus tres llaves manuales, puedas crear un sinfín de combinaciones: por un lado puedes elegir el tipo de sesión que quieres (meditación guiada, respiración, escaneo corporal, visualizaciones, música relajante, sonidos de la naturaleza), por otro la duración -desde 8 a 20 minutos- y por otro los temas y formas de relajación.

Práctico y manejable, diseñado en madera natural, cuenta con un altavoz graduable que te permite escuchar o si no, con tus auriculares en cualquier momento y lugar. Y además, para que todo el mundo esté cómodo, también se puede elegir entre que te dirija tus sesiones una voz masculina o femenina.

Su precio 79,95 euros es de y puedes hacerte con el tuyo aquí.

*Imágenes: Unsplash e Instagram Morphée