Moda
La semana pasada estrenaba en Telecinco el primer capítulo de la miniserie La Bella y la Bestia (esta noche se emite la segunda y última parte del cuento) y el lunes próximo hará lo mismo en TVE con Carlos, Rey Emperador, su último proyecto en el que da vida a Isabel de Portugal. Pero Blanca Suárez también ha tenido tiempo últimamente de participar en dos películas de Pedro Almodóvar, La piel que habito y Los amantes pasajeros, y de convertirse en imagen de Intimissimi (plagando las ciudades con sensuales imágenes en ropa interior).
«Mi padre ya no se esperaba un papel ‘normal’ y completamente vestida así que este año le hago un buen regalo», bromeaba la actriz con nuestra compañera de Grazia Italia antes de empezar a hablar de cuentos de hadas y príncipes azules…
¿Crees en los finales felices?
¡Es bonito creer! Yo busco el happy ending hasta cuando no lo hay.
¿Y en el príncipe azul?
Sí, pero es un príncipe cambiante que varía según el momento de la vida.
¿En qué te fijas en un hombre?
En las manos y en los zapatos. Soy una gran observadora de los pequeños detalles; esos que, aunque no lo parezca, revelan la personalidad del que tienes delante.
¿Qué papel juega la belleza?
Importa mucho: vivimos en la sociedad de la apariencia donde lo que importa es la primera impresión. Aún así, creo que algo está empezando a cambiar, que la gente es cada vez menos superficial. Se empieza a hablar del talento y de las capacidades.
¿Pero ser guapa te habrá abierto muchas puertas?
No lo sé, no soy consciente de cuánto ha podido influir mi aspecto en mi carrera. Pero estaría ya acabada si fuese solo una cara bonita, ¿no te parece?
Y, además, el estilo de Blanca Suárez:
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