Moda

Hay un momento en el año en el que el aire cambia. Las hojas caen, los escaparates se tiñen de tonos canela y los feeds se llenan de tazas con espuma y canela espolvoreada. Es el regreso del Pumpkin Spice Latte, el café más icónico del otoño y símbolo indiscutible de una estación que huele a vainilla, nostalgia y renovación.
El fenómeno que cambió la forma de entender el café
Cuando Starbucks lanzó su Pumpkin Spice Latte en 2003, no imaginaba que estaba creando una religión sensorial. Veintiún años después, sigue siendo el inicio oficial del otoño para medio planeta. Su mezcla —espresso, leche cremosa, puré de calabaza, canela, jengibre y nuez moscada— no solo conquistó paladares, sino que creó una estética.
El “momento PSL” es más que una bebida: es ritual, es mood, es ese paréntesis cálido que te recuerda que puedes bajar el ritmo. Y es que, cuando el otoño empieza a pintar las calles de naranja, hay sabores que regresan como viejos conocidos. Y en Starbucks, eso solo puede significar una cosa: el regreso del icónico Pumpkin Spice Latte. Desde su llegada a España en 2014, esta bebida se ha convertido en un símbolo del otoño, y este año vuelve en sus variantes Iced y Frappuccino®, para llenar cada momento con su inconfundible toque de calabaza.
Por qué nos obsesiona (y por qué tiene sentido)
El sabor de lo reconfortante
Gracias a su atractiva fórmula, fácil de identificar con la temporada otoñal, pedir un Pumpkin Spice Latte se ha convertido en una auténtica rutina para muchos. Su mezcla reconfortante de café, calabaza y especias como el clavo, la canela y la nuez moscada evoca al momento los colores y aromas del otoño, además de evocar hogar, calma, confort. En un mundo acelerado, ese golpe de dulzor con especias es pausa líquida.
La estética otoñal hecha ritual
No hay filtro más reconocible que el de una mano con manicura nude sosteniendo una taza PSL junto a un abrigo camel. Es lifestyle, sí, pero también identidad.
El marketing más emocional del café
Starbucks convirtió la nostalgia en producto: cada año, un lanzamiento limitado que dura lo justo para desearlo. Psicología pura del “solo por un tiempo”.
Versatilidad gourmet
Hoy existen versiones vegan friendly, iced, con avena o sin azúcar, y hasta adaptaciones caseras con calabaza natural. El icono se democratiza sin perder encanto. Además de su versión caliente, existen también otras opciones para los amantes de las bebidas frías, como su versión Iced y Frappuccino®, cada una ofrece una forma distinta de saborear una de las estaciones más esperadas del año, adaptándose a cada momento y a cada gusto.
La mejor época del año empieza aquí
El Pumpkin Spice Latte no es solo una bebida: es una excusa para cambiar de ritmo. Para estrenar botas, encender velas, volver a leer por placer y dar la bienvenida a los pequeños rituales del frío.
Porque sí, hay quien dice que el otoño es la antesala del invierno, pero también es la temporada más sensorial, más cinematográfica, más cozy-chic del calendario. Y en su centro, hay una taza que lo resume todo.
tips para vivir el otoño con sabor PSL
- Sustituye tu café diario por una versión especiada una vez por semana: pequeño lujo, gran energía.
- Combina tu momento PSL con tu playlist de jazz o soul otoñal favorita
- Atrévete a preparar tu propia versión casera con puré natural de calabaza y canela en rama
- Y si estás en modo foto: fondo de hojas secas, jersey oversize, taza en mano. Simple, auténtico y muy tú.
- Ya sea caliente para empezar el día con energía o fría, el Pumpkin Spice Latte sigue siendo la sensación perfecta de esta época. Y esta temporada puedes acompañar tu bebida con el Pumpkin Brownie con base de chocolate y ese toque de cobertura de especias de calabaza que lo hace único e ideal para una pausa con sabor puramente otoñal.
Toma nota porque si todavía no has ido por el tuyo, date prisa porque la temporada de Pumpkin Spice Latte se alargará hasta el 5 de noviembre.
*Imágenes: Pexels y cortesía