Moda
No es un desfile más. Este 18 de septiembre, Carolina Herrera lleva su colección Primavera-Verano 2026 al corazón de Madrid, transformando la histórica Plaza Mayor en una pasarela bajo la luna. Una puesta en escena tan espectacular como simbólica, el primer show principal de la casa fuera de Nueva York en sus 40 años de historia.
Un escenario que respira historia y estilo
Imagínalo: siglos de historia, arcos clásicos y balcones con alma, convertidos en el marco de una colección que reinventa la elegancia contemporánea. Wes Gordon, director creativo de la firma, lo tiene claro: “La Plaza Mayor late con el pulso de Madrid. Su energía fue fuente de inspiración para la colección.”
Este desfile será mucho más que moda: es una declaración de amor a España. Con el objetivo de honrar la artesanía local, la marca integrará creaciones de talentos y talleres españoles para tejer una narrativa llena de respeto cultural.
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Un movimiento editorial estratégico
El desfile coincide con la Mercedes-Benz Fashion Week Madrid —que arranca el 17 de septiembre— ampliando su impacto a escala global. Carolina Herrera sale de su zona de confort en Nueva York para reinar en el centro de Europa, una apuesta audaz que reafirma su alianza con España, estrechada tras la adquisición de la firma por Puig en 1995.
El plan completo: moda, nostalgia y fiesta
- 17 septiembre: cena de bienvenida privada con una atmósfera de confidencia elegante.
- 18 septiembre: el desfile en la Plaza Mayor, una pasarela icónica convertida en escenario de moda.
- After-party: lanzamiento de La Bomba, la nueva fragancia de la casa, que coronará una noche que hará historia.
En resumen Grazia
- Fechado en el calendario histórico: 18 de septiembre marca un antes y un después para la marca.
- Pasarela con poesía urbana: Carolina Herrera eleva la Plaza Mayor como símbolo de elegancia contemporánea.
- Moda multicultural: una celebración de creatividad que honrará el saber hacer local y la herencia Herrera.
- Estética y atmósfera: moda, historia y fiesta se funden para crear un momento icónico.
Este desfile es la excusa perfecta para que Madrid vuelva a bailar al ritmo de la moda. Porque la verdadera alta costura puede suceder en cualquier plaza.
*Imágenes: cortesía
