Moda
Desde Oviedo hasta el corazón de Copenhague, la diseñadora Celia Bernardo, fundadora de la firma homónima Celia B, firmó ayer una de las presentaciones más vibrantes de esta edición de la Copenhaguen Fashion Week. En un patio interior típico danés, con adoquines y hiedra trepando por muros de ladrillo, la firma desplegó su particular universo estético: maximalismo textil, folklore reinventado y un inconfundible espíritu festivo que transformó el evento en una auténtica celebración del color.
A medio camino entre showroom, picnic y happening, la experiencia fue una explosión visual cuidadosamente orquestada que invitaba a descubrir no solo su próxima colección de prêt-à-porter, sino también una nueva incursión en el diseño de hogar. Manteles de patchwork, colgaduras estampadas y detalles artesanales sirvieron de escenario para una colección en la que los abrigos con borreguito, las prendas de punto con animales bordados y los vestidos de tul con flores tridimensionales robaron todas las miradas.
No faltaron a la cita algunas de las influencers más activas de la moda española en redes, como Cris Mata, Alex Segura o Mariana Díez Moliner, quienes celebraron con entusiasmo el debut nórdico de la firma. El evento fue descrito por algunos asistentes como “una burbuja de color en el gris danés”, y lo cierto es que pocas marcas consiguen transmitir tanta vitalidad en un formato tan íntimo y cálido.
En palabras de la propia diseñadora, “esto no es solo otro evento, es Celia B en todo su esplendor”, y no se equivoca. En una semana de la moda marcada por la funcionalidad escandinava, la irrupción de Celia B fue un soplo de aire fresco y un canto a la alegría estética.
*Imágenes: Instagram Celia B
