Moda
En una nueva y sorprendente movida que ha dejado atónitos a los amantes de la moda y los asistentes a festivales, Balenciaga lanzó su nueva pulsera “raver used bracelet”, con un precio impensable de 3,500 euros.
Esta pulsera, parte de la colección de alta costura Otoño/Invierno 2024-25 presentada en París, está diseñada para parecer una pulsera auténticamente usada en un festival. Cada pieza es elaborada a mano y requiere un día completo de trabajo, incluyendo técnicas artesanales detalladas.
Para las que prefieren un look de día 1, Balenciaga también ofrece una pulsera de ‘raver’ por 4,500 euros, simulando una pulsera nueva de festival. Ambos modelos requieren una cita privada para su compra, y se unen a la lista de artículos cotidianos excesivamente costosos de la marca, como bolsos que parecen bolsas de papas fritas y vestidos de bolsas de basura.
Balenciaga continúa destacándose por su capacidad de mezclar la alta costura con elementos de la cultura popular, generando conversación y, a menudo, controversia en la industria de la moda. Esta nueva propuesta no es la excepción, atrayendo tanto a seguidores de la moda como a críticos que cuestionan la necesidad y el precio de estos artículos.
La pulsera ‘raver usado’ ha sido recibida con opiniones divididas en redes sociales. Mientras algunos aplauden la creatividad y la artesanía detrás de cada pieza, otros no pueden evitar preguntarse si el precio justifica el producto. Este debate es un testimonio de la habilidad de Balenciaga para permanecer en el centro de la conversación sobre moda y lujo.
Independientemente de las opiniones, una cosa es cierta: la pulsera ‘raver usado’ es una pieza que llama la atención y seguramente será un tema de conversación en los círculos de la moda. Este tipo de productos son un recordatorio de cómo las casas de moda de lujo no solo venden productos, sino también experiencias y símbolos de estatus.
Para aquellas interesadas en adquirir una de estas exclusivas piezas, la recomendación es programar una cita privada con Balenciaga. La marca asegura que cada pulsera es única y hecha a mano, garantizando que cada cliente obtenga un producto exclusivo y de alta calidad.
Con esta nueva propuesta, Balenciaga reafirma su posición como una de las marcas más innovadoras y audaces en la moda contemporánea, siempre desafiando los límites de lo convencional y provocando conversaciones que van más allá de la moda.
